Los Mecanismos del Perdón

Recibí el apodo de "Burnout" (tipo "quemador") cuando era adolescente y trabajaba en talleres mecánicos. No por mi personalidad o mis hábitos, sino porque quemé varios motores mientras intentaba aprender cómo funcionaban. El olor a cables derretidos y motores atascados era mi marca registrada. A mis compañeros de trabajo y a mí nos pareció gracioso, pero a mis jefes no tanto. jeje

He sido mecánico durante 20 años y la belleza de un motor radica en su simplicidad y claridad. Cuando se enciende la luz de "revisar motor", tu solucionas el problema y la luz se apaga. Las cosas funcionan o no. Un buen mecánico no se determina por cómo te sientes acerca de él o si es agradable, sino porque el motor funciona cuando ha terminado.

Parece una locura no usar esta misma lógica de sentido común cuando se trata de buscar respuestas a nuestros problemas interiores; Existe un pensamiento implícito, no expresado, de que todo lo relacionado con Dios es "bonito", pero nadie tiene expectativas de que lo que Él ofrece en realidad nos ayude para algo, con la misma lógica... Dios funciona, o Él no existe.

Quiero contarte una historia: estaba sentado cara a cara hablando con un hombre genial en la cárcel. Estaba cumpliendo una condena de por vida. Me dijo que nada lo ayudaba a lidiar con su culpa, probó todo el abanico de religiones, incluido el cristianismo; Por un tiempo, se sintió mejor, pero una vez que regresaba a su celda, la esperanza desaparecía y era aplastado por los sentimientos de culpabilidad y una conciencia atormentada. Simplemente no funcionaban. Debió haberme dicho diez veces que simplemente no podía perdonarse a sí mismo, lo que había hecho lo estaba matando por dentro. Le mostré Romanos 8:1. Pablo dice: "Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús". Me interrumpió a mitad de la frase y dijo: "Espera, ¿qué? ¿Quieres decir que no hay culpa? ¿Cómo es eso siquiera posible?", le dije “hermano, no solo es posible, es la razón completa por la que Jesús vino”.

Las religiones no funcionan para eliminar la culpa del hombre porque son solo doctrinas, enseñanzas, sentimientos y emociones. Jesús no se trata de conceptos e ideales vacíos. Él es el único que hizo algo en el tiempo y el espacio para eliminar físicamente nuestra culpa.

No Es Un Concepto, Sino Realidad

Cuando aprendí por primera vez sobre motores, fue a través del correo. Pasé todas las pruebas escritas, así que, en papel era un "Mecánico Certificado". Conocía todos los conceptos, veía los diagramas y aprendía la terminología. Pero la primera vez que quité la culata de un motor, me sentí abrumado por la realidad de ello. Me di cuenta de que no tenía ni idea de cómo arreglar lo que estaba roto.

He escuchado a muchos hombres hablar sobre "la sangre sacrificada de Jesús" con mucha emoción, pero cuando se les pregunta: "¿Por qué importa?", responden con miradas vacías y sin comprensión. Han aprendido las doctrinas, pero no saben cómo funciona en la práctica.

Poner en Marcha los Engranajes de Nuestra Mente

Después de admitir que no sabía de qué estaba hablando, tuve que reaprender mucho de lo que pensaba que ya sabía. Me tomó mucho esfuerzo comprender el funcionamiento de un motor, pero al final, valió la pena. De la misma manera, hermano, te voy a pedir que abras un poco tu mente para entender esto. Sé lo irrelevante y "fuera de lugar" que puede sonar una palabra como "sacrificio", pero entender el sacrificio de Jesús te dará algo real; Conquistará todas las acusaciones y recuerdos que inundan tu mente en las horas tormentosas de la noche así sigue conmigo aquí en lo que escribo, ¿okay? El sacrificio no es un asunto secundario, no es como una luz trasera o un claxon, sino el corazón del motor, es literalmente la esencia de toda la Biblia, así que vamos a desglosarlo como lo haríamos si fuéramos a diagnosticar un motor:

Como una cadena, la fuerza surge cuando todas las ideas se "enlazan" en tu mente.

La Luz de Revisar Motor

Cuando estás conduciendo un coche y se enciende la luz de "Revisar Motor", sabes que no puedes ignorarla; el coche puede seguir funcionando, pero es solo cuestión de tiempo antes de que te deje tirado en el camino (como cuando se encendió la luz de mi motor y mi alternador falló mientras estaba en el desierto Peruano con el mecánico más cercano a 100 millas, era un problema).

La culpa es nuestra, la "luz de revisar motor" nos atormenta, diciéndonos que algo está mal. La culpa no es una broma, si la ignoras seguirá causando estragos en tu corazón y mente, y te dejará inoperante. Una oración de pecador o un verso de la Biblia pueden aliviarla por un momento, pero volverá rápidamente. La culpa tiene que ser enfrentada.

El Diagnóstico

Cuando llevas tu coche al taller, el mecánico lo conectará a una máquina de diagnóstico, realizará un análisis exhaustivo para definir el origen y señalar la ubicación exacta del problema; de lo contrario, terminará intentando solucionar un síntoma del problema sin abordar nunca la causa raíz.

Nuestra conciencia es el asiento mismo de nuestro ser, es el lugar y la fuente de toda nuestra culpa, es como una junta de culata averiada que sigue perdiendo aceite, es una pequeña indicación de un problema enorme que bloqueará el motor si no se soluciona.

El goteo constante de la culpa demuestra que la conciencia está averiada y necesita una revisión completa. Al igual que en una reconstrucción del motor, es necesario quitar la junta antigua, y después de limpiarla a fondo, se puede instalar una nueva junta. De la misma manera, nuestra conciencia debe ser limpiada para que el sello del perdón pueda ser instalado adecuadamente y detener la fuga de culpa.

Una Reparación Temporal

Cuando un motor necesita una revisión completa, tienes que hacer una reparación temporal para mantenerlo funcionando hasta que puedas conseguir las piezas adecuadas. Se necesita tiempo para configurar todo y tener todo en perfecto orden.

El Antiguo Testamento es un poco así. Fue una solución temporal para un problema gigantesco que Dios se estaba preparando para resolver más tarde en Jesús.

Todos tenemos ese sentimiento de que cuando hacemos algo mal, deberíamos tratar de hacer algo bien para compensar lo que hicimos mal. Muchos hombres hablan de comenzar una organización benéfica después de salir de la cárcel con la esperanza de compensar sus crímenes. Esperamos que las cosas buenas que hacemos compensen las malas cosas que hicimos y que nuestra conciencia deje de molestarnos. Este pensamiento en realidad surge de nuestra conciencia como un esfuerzo por satisfacer nuestra necesidad de expiación y sacrificio.

La Mecánica del Sacrificio

No es tan complicado como piensas, amigo. Todo el asunto del sacrificio se puede resumir en una palabra: “Sustituto” como un intercambio o un reemplazo. En lugar de que Dios mate a un hombre por su pecado, permitió que el hombre se sustituyera con uno de sus animales; la pena por su pecado caería sobre el animal, en lugar de sobre él. Era una vida por otra vida. La sangre del animal se ofrecía en intercambio por su sangre y sería perdonado (Levítico 5). Mira, Dios dice: "Porque la vida de toda carne está en la sangre", así que "Sin derramamiento de sangre no hay perdón" (Levítico 17:11/Hebreos 9:22). Tiene sentido ¿verdad, amigo?

Cada vez que esto sucedía, era solo por un pecado específico, temporalmente eliminaba la culpa, pero regresaba de inmediato porque el pecado no es solo un acto ocasional, sino la misma naturaleza en la que vivimos. Se volvía absurdo, los humanos simplemente no podemos seguir el ritmo de todos los sacrificios necesarios por sus pecados, muchos chicos me han contado sobre tener que recordar todos sus pecados para confesarlos a un sacerdote y simplemente se dieron por vencidos porque no podían seguir el ritmo. 

Revisión Completa

Antes de comenzar una revisión completa del motor, un mecánico se sentará y calculará cada detalle del trabajo a realizar. Se asegurará de tener todas las herramientas, piezas, accesorios y conocer todas las especificaciones para que el motor funcione perfectamente una vez reensamblado.

Antes de venir a la Tierra, Jesús se sentó y contempló cada detalle legal de lo que tendría que hacer para ofrecer un sacrificio perfecto y cumplir con todos los requisitos del Padre. Pensó en ti por tu nombre y en lo que sería necesario para restaurarte, Él vio tu crimen (ya sea robo, violación, asesinato o algo aún peor). Jesús calculó el castigo exacto y doloroso que tendría que soportar por los crímenes de todo el mundo.

Es como si Jesús se levantara, viniera al Padre y, a pesar de todo, dijera: Iré, ofreceré Mi Propia sangre perfecta como sacrificio sustituto por su pecado, será un sacrificio por todos los pecados; por todo el tiempo. Ellos no tendrán que hacer nada, yo lo haré todo (Hebreos 10:7-10).

El Alto Costo del Rendimiento Confiable

Jesús no hizo esto en algún planeta cósmico distante o en un sueño místico, tomó un cuerpo físico y caminó como uno de nosotros. Llevó el mismo pecado que rompió nuestra conciencia, para poder relacionarse plenamente con todos los pecados, de manera voluntaria, desde Su propio corazón, cargó una cruz cuesta arriba, "como un cordero que es llevado al matadero" (Isaías 53:7). Por ese momento, Dios puso sobre Él la totalidad del pecado (no pecados individuales, sino todo pecado) para que fuera un sacrificio por toda la eternidad. Jesús soportó la pena completa que merecemos y eso Lo mató. Como el Cordero de Dios sacrificado y nuestro sustituto, en la cruz, Jesús obtuvo "redención eterna", no con la sangre de animales, sino con su propia sangre perfecta "se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, y limpió nuestra conciencia" (Hebreos 9:14/Juan 1:29).

Cuando Jesús exclamó "¡Consumado es!" en ese momento la luz de "revisar motor" se apagó (Juan 19:30). Lo que hizo funciona. La culpa fue absuelta, el perdón absoluto, por todas las cosas pasadas, presentes y futuras, estaba completo.

Solo Sube y Conduce

Si alguien te regalara un vehículo nuevo de alto rendimiento con un V8 turbo cromado, no irías a trabajar en el motor, sino que saldrías a la carretera abierta.

El sacrificio de Jesús es completo y no requiere ningún esfuerzo de tu parte, solo sube y conduce, créele. Él salió de la tumba y te lanzó las llaves del "vehículo" definitivo que puede llevarte a su Padre.

Así que, si terminas este artículo pensando que tienes que limpiar tus acciones para ser perdonado, entonces lo siento amigo, pero te perdiste todo el punto. Mientras creas que depende de ti, tu culpa permanecerá. Un goteo constante de culpa prueba que el sello del perdón no estaba correctamente sellado. Cualquier cosa que creas que tienes que dejar de hacer o comenzar a hacer, es tu intento de ofrecer tu propio "sacrificio" por cada fracaso y pecado individual. Si todavía depende de nosotros hacer enmiendas por nosotros mismos, entonces todo lo que Jesús hizo fue en vano (Gal.2:21)

Su perdón es tal que no tiene nada que ver con quién eres ni con lo que hiciste. Tiene todo que ver con quién es Él y lo que hizo.

Creer en Él no es un proceso largo y molesto de reforma, es una elección simple, es una fe real que dice: "No soy bueno y nunca podré serlo, no puedo perdonarme a mí mismo, pero Jesús, Tú lo hiciste y eso es todo lo que importa, tu sangre es suficiente".

Cada vez que el diablo te acuse o intente usar la culpa para derribarte, recuerda Su sacrificio.

El perdón no perdona, Jesús perdona. Deja de intentarlo. Comienza a creer.

Cuando la culpa se va, es como la libertad de conducir junto al océano con el techo abajo y el viento en tu cabello. No hay mayor felicidad en toda la vida que ser perdonado.